Reconozco que conocí a Ana María Paris como excelente dibujante, muy poco sabía de su incursión dentro de la disciplina y/o especialidad Pintura.
En la muestra que presentó en el Centro Experimental del Color, abarcando toda la sala, obras en la bidi y tridimensión, con muy buena distribución y montaje de las mismas, contando esta vez con la valiosa colaboración de Raúl Ishikawa.
Atrajeron mi atención por su plasticidad Y BELLEZA
Las temáticas en su mayoría fueron inspiradas por poemas, las que fueron plasmadas con distintos materiales sobre superficies lisas y texturadas, sobre todo las obras pictóricas, cuyo procedimiento predomi-
nante en la materia es el acrílico, aplicando cálidos y frios, con predominio de azules y rojos en cada composición que Ana María ha sabido resolver con solvencia, moviéndose dentro de dos o tres lineamientos plásticos , siempre desde mi mirada.
Un párrafo especial merece la presentación de objetos intrínsicamente ligados a la historia familiar de Ana , y esa reminiscencia hace que haya recreado los mismos, con rostros expresivos que irrradian y transfieren gran ternura, que es captado por el observador más allá de lo visual.
Dríptico con figuras geométicas planimétricas en una abstracción que se proyectaba desde la bidi a la la tridimensión, con cuerpos geométricos monocromáticos , yacían sobre una superficie acromática.
Complementó el conjunto de obras con transcripción de poemas, ya sea sobre la superficie elaborada con formas , sobre el muro y las superficies de los paneles.
Texto:G.I.A FRIAS PUPKIN
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